Probablemente todos, en algún momento de nuestra infancia, hemos jugado a este juego. En él de lo que se trataba era de llegar a lo largo de 62 casillas al centro del juego, que era donde estaba la Gran Oca Madre.
El juego de la oca es un símbolo de la vida ya que la vida, como el juego, es un viaje, un camino que uno hace casa a casa, de casilla en casilla, en el que uno intenta adaptarse lo mejor posible a las circunstancias y vivir lo más felizmente posible.
Pasamos parte de nuestra vida en las aulas, primero en el cole (aquellos que hayan ido a la guarde entran antes), luego en el Instituto y finalmente en la Universidad. Esas vivencias forman parte de ese juego también.
Hace tres cursos habéis empezado una partida que está a punto de terminar (bueno... durará 9 meses aproximadamente). Habéis superado 1º,2º y 3º de ESO de forma excelente y acabáis de llegar a la casilla de 4º de ESO. Durante el juego os encontraréis obstáculos que tendréis que superar (suspensos, agobios, desgana, inquietud...),pruebas que tendréis que realizar para poder avanzar (exámenes, trabajos, lecturas...) y así llegar a la META.
No os desaniméis porque en algún momento de la partida os toque alguna casilla que os dificulte avanzar, de las caídas siempre se aprende y tenéis que seguir "jugando" con ganas. Lo importante no es como se empieza (que es importante también) sino como se termina. Y en este juego no hay solo un ganador sino que todos podéis ser ganadores si os lo proponéis.
¡Mucho ánimo en esta última fase de la partida!
¡COMIENZA EL JUEGO!
¡MUCHA SUERTE!
¡MUCHA SUERTE!
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